Durante la última inspección llevada a cabo por expertos del CSN a la central nuclear Ascó II (Tarragona), los inspectores detectaron anomalías en los valores del caudal de dos de las tres bombas de agua de alimentación auxiliar de los generadores de vapor, registrados durante las tres últimas paradas automáticas, que han estado siendo analizadas.
Las anomalías detectadas no guardan relación con las de los cierres espurios de las válvulas de agua de alimentación que dieron lugar a las tres paradas automáticas consecutivas de Ascó II, ya solucionados.
Tras confirmar el CSN el hallazgo de que los caudales estaban por debajo de los valores establecidos en las base de diseño y, en cumplimiento de las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento, el titular ha decidido llevar a parada la Unidad para adoptar las medidas correctoras oportunas.
En consecuencia, la instalación ha comunicado en la tarde de hoy al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), siguiendo el procedimiento reglamentario, el suceso notificable consistente en la iniciación de la parada manual. El suceso, que no ha supuesto riesgo para los trabajadores, la población o el medio ambiente, está pendiente de clasificación en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES).
Las anomalías detectadas no guardan relación con las de los cierres espurios de las válvulas de agua de alimentación que dieron lugar a las tres paradas automáticas consecutivas de Ascó II, ya solucionados.
Tras confirmar el CSN el hallazgo de que los caudales estaban por debajo de los valores establecidos en las base de diseño y, en cumplimiento de las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento, el titular ha decidido llevar a parada la Unidad para adoptar las medidas correctoras oportunas.